Wednesday, October 29, 2008

Judas Priest - Nostradamus

Judas Priest – Nostradamus
2008
**
Nostradamus es un álbum que llega unos veinte años atrasado. ¿Un álbum conceptual acerca del famoso profeta apocalíptico del siglo 16? ¿Qué el mundo se va a acabar? ¿Qué las plagas, las guerras y mil calamidades más? ¿Alo? Año 2008. A nadie le importa un comino. Hoy en día la gente está tan acostumbrada a los desastres, a verlos en vivo por CNN que ya nada impacta. ¿Alguien va a dejar de hacer un asado en su casa con los amigos sólo porque en Indonesia un tsunami mató a trescientas mil personas? No, el asado va igual. Por tanto, la sola idea de un disco doble, conceptual, de la figura de Nostradamus, proveniente además de Judas Priest, que, dicho sea de paso, jamás en su historia ha destacado por sus letras, resulta, irrisorio. De hecho las letras de Nostradamus son bastante débiles y esto se perdonaría si no se tratara de un disco tan pretencioso, tan excesivo. Rondando la hora cuarenta, pone a prueba la paciencia de hasta el más acérrimo fan.

Olvidemos todo lo anterior por un momento. Focalicémonos ahora única y exclusivamente en la música. Ok, bueno, aquí tampoco hay mucho que rescatar. Desde luego el disco tiene sus momentos inspirados, sus pasajes memorables, pero al mismo tiempo tiene mucho relleno. ¿Eran necesarios todos los interludios? Es como carne con exceso de grasa. Para haber hecho de este disco algo destacable hubiese sido mejor eliminar todo lo extra, dejando un solo disco. Temas como “Revelations” y “Persecution” destacan como lo mejor del disco, pero por otro lado no revelan nada, absolutamente nada nuevo. Temas como esos ya se los conocíamos a Judas.

Lo que sí es nuevo es la idea de concepto, y eso se aprecia. De hecho, es el primer disco conceptual de Judas. No hay nada malo en eso, ¿pero por qué no elegir otro concepto? ¿Por qué no tomar algo más terrenal? ¿Por qué siempre ese afán de lo fantástico? Fantasía y metal van de la mano. Siempre ha sido así. ¿Pero tendrá que ser siempre así? A esta altura el chiste ya está demasiado repetido. Chuch Schuldiner de Death entendió que no y su música no dejó de ser metal. Pero ese es otro tema.

Pero bueno, al menos la banda sigue pataleando y tomando riesgos. Un álbum conceptual, por definición, es riesgoso. A veces resulta la apuesta, otras no. Creo que esta vez no le dieron en el blanco.